Al iniciar un negocio o empresa deberías tener en cuenta que existen unos objetivos fundamentales que giran en torno a ésta como son: la supervivencia, la utilidad y el crecimiento los cuales están directamente interrelacionados.
Veamos en que consiste cada uno de dichos objetivos.
Vender es el propósito que se plantea el empresario al ofrecer productos y servicios con un objetivo bien determinado como es que los consumidores adquieran o compren lo ofrecido. En otras palabras vender es lo que brinda la supervivencia al negocio o empresa.
El ejercicio de producir, comercializar o distribuir esos bienes y servicios deberá generar una utilidad económica para la empresa. Con las utilidades se logra el crecimiento de la empresa.
Al iniciar tu negocio, seguramente conoces muy bien tus productos y servicios, pero no hay que olvidar que las ventas no se pueden dar por seguras. Esta es una habilidad de supervivencia y es determinante. ¡Alguien tiene que vender!
Así entonces que pregúntate, ¿cómo me siento acerca de la venta? Quizás usted sea un profesional experimentado en el arte de vender. Sabe cómo hacerlo, ha efectuado muchas ventas en el pasado, y conoce su industria. Sí es así puede tener problemas, pero quizás el vender no será uno de ellos.
La otra cara de la moneda, es que en realidad nunca ha tenido que salir y lograr hacer una venta. Usted proviene de trabajar en una empresa, un laboratorio, o de una oficina o bien de una fabrica o planta, o proviene directamente de una escuela o de la universidad.
El oficio de vender le parece una especie de arte o profesión indeseable, uno del que no estas muy seguro de desear aprender.
Y si detestas las ventas es mejor que te vayas zafando de los siguientes paradigmas:
- Un buen producto se “venderá por sí sólo”
- Una publicidad brillante “lo hará venderse”
- Un enfoque indiferente, fastidioso y breve para las ventas, funcionará.
No se engañe con estas afirmaciones ninguna de estos conceptos hará que sus productos y servicios se vendan.
¡Alguien tiene que vender!
Alguien, una persona o algunas personas específicas de su empresa, deberán ser responsables de movilizar el producto. Ahora sí toma la responsabilidad directa de las ventas usted mismo, debes comprometerte a realizar la tarea y hacerla bien.
Si careces de talento o inclinación para hacerlo, entonces delegue a alguien competente y bien motivado. Pero sí desprecia a los vendedores, es mejor que aprenda a superar tal idea, o por lo menos ocúltela. Pues necesitará de la venta para la supervivencia del negocio o empresa.
Finalmente tenga en cuenta que la venta es la llave de la supervivencia del negocio, ésta de la utilidad y ésta a su vez del crecimiento.
Te invito entonces a tomar acción hoy mismo frente las habilidades que necesitas desarrollar para las ventas, o en su defecto delegar y conformar un equipo de ventas para la supervivencia y prosperidad de tu negocio. De todas formas adoptar habilidades de ventas te ayudaran a efectuar las ventas o a delegarlas con conocimiento de causa.
Ricardo Torres G.
Comprometido con tu éxito