Ha transcurrido poco más de un mes de este nuevo año, pero vale la pena recordar como al finalizar el año hicimos una evaluación de nuestras vidas, del año que transcurrió, de las metas alcanzadas y aquellas que quedaron postergadas. Todo esto sencillamente para elaborar nuestras metas y propósitos de año nuevo las cuales esperamos que funcionen.
Puede ser que tú también hayas sido víctima de críticas de tus familiares y de personas cercanas que no creen que elaborar metas y propósitos para el nuevo año funcione. Sobre todo, de parte de aquellos, cuyo año pudo haber sido más complicado y lo único que desean es que termine a la brevedad.
Sin importar esas críticas y cómo fue este último año, puedes estar seguro de que este nuevo año trae consigo nuevas oportunidades, metas y sueños que tal vez durante mucho tiempo se postergaron pero que ahora se realizarán.
Para mí y para mi familia los finales de año traen consigo una carga de trabajo bien importante por nuestra actividad comercial y adicionalmente para mí, en éste que tuve afrontar un estado convalecencia hasta mediados del mes de enero.
Situación que aproveché para hacer una evaluación del año que transcurrió y de las metas que pude alcanzar, cuya evaluación me pareció favorable pero que no me dejo completamente satisfecho.
Así que, en el afán de lograr mejores resultados para el nuevo año, encontré un artículo titulado “Los propósitos del Año Nuevo no funcionan” en Planes Bible One Word that will change your life, que realmente consiste en un plan que nos enseña cómo alcanzar metas a través de una única palabra para el año y no a través de la elaboración de propósitos.
Eso partiendo de la base de algunas investigaciones que comprueban que el cincuenta por ciento de los creadores de propósitos fracasan a finales de enero y 9 de 10 las abandonan para marzo.
Yo no quiero estar entre esos creadores de propósitos que fracasan o abandonan, por ello he tomado la decisión de realizar el ejercicio para descubrir mi única palabra para el año y poder lograr una mayor claridad, pasión y propósito a mi vida.
El ejercicio de una única palabra nos trae simplicidad y enfoque. Nos aleja de las distracciones y nos mantiene centrados en lo que importa realmente. Interviene en todas las áreas: espiritual física, financiera, emocional, relacional y mentalmente.
Supongo que tú tampoco quieres estar entre los que fracasan o abandonan, te invito entonces a que hagas el ejercicio y sus tareas que consiste en cuatro días de práctica. Pero te lo voy a entregar en dos partes y textualmente para no hacerlo tan dispendioso y engorroso.
Quiero aclarar que, por la fuente no se trata de religión sino un ejercicio que se puede hacer por convicción partiendo de la base que somos seres espirituales, con ambiciones y deseos de lograr el éxito.
«Día 1
El poder de una única palabra
Cincuenta por ciento de los creadores de propósitos fracasan a finales de enero y 9 de 10 las abandonan para marzo
Así que, en lugar de propósitos, obtenga su única palabra para el año… ¡pero sea cuidadoso! Podría cambiarlo.
Si piensa como nosotros «lograr que se haga», ha hecho su parte de fijar objetivos al inicio de cada Año Nuevo. Sin embargo, a medida que pasa el tiempo, nos sentimos frustrados al quedarnos cortos en nuestros ambiciosos planes. Tratamos de hacer tanto, y como resultado, no hicimos nada bien.
En 1999, iniciamos la simple disciplina de desarrollar el tema de una única palabra para el año próximo. Así es—una única palabra. No una frase o una declaración, sino una única palabra. Al enfocarse en solo una palabra, hemos experimentado un increíble cambio de vida año tras año. Cuando usted descubre una única palabra para el año, esta le da una mayor claridad, pasión y propósito a su vida.
El ejercicio de una única palabra le trae simplicidad y enfoque. Nos aleja de las distracciones y nos mantiene centrados en lo que importa realmente. Esta ha intervenido en todas las áreas: espiritual, física, financiera, emocional, relacional y mentalmente. Dios nos ha transformado a través de este ejercicio; Dios se deleita en el cambio de vida.
Hay una razón por la que decimos, «Obtenga una única palabra para el año…pero tenga cuidado». Tan pronto como encuentra su palabra, la batalla comienza. Se iniciará un proceso de enseñanza, desarrollo, refinamiento y moldeo. Dios usará su palabra como una luz y un espejo – iluminando su camino y revelando cosas que necesita cambiar. Esto facilita un gran viaje de altos y bajos, todos diseñados para hacer de usted la persona que Dios ha creado en usted
Ha sido nuestra experiencia que Dios rápidamente revela Sus planes para el año de acuerdo a su única palabra. Esa palabra (ya sea una disciplina, fruto del Espíritu, rasgo del carácter, o atributo de Dios) ¡lo identificará todo el año! Así que descubra su única palabra para el año y ¡compártala con los demás! ¡Esta puede cambiar su vida!
- ¿Qué le ha estado diciendo Dios en este último año?
- ¿De qué área de su vida quiere Dios hacerse cargo y usar para Su gloria?
- ¿Cómo quiere Dios posicionarse en su vida el próximo año?
Tarea
Salmo 27:1-14; Lucas 18:22; Marcos 10:21
Tiempo extra
Amado Señor, te pido que hagas un año de cambio en mi vida. Revélate a mí a medida que me muestras cuál será el tema de mi única palabra. Lléname con Tu Espíritu Santo. Soy consciente que es un viaje de aprendizaje y no una tarea que cumplir. Moldea mi vida a medida que hago vida mi única palabra en mi diario vivir. En el nombre de Jesús, Amén.
Día 2
Una única palabra
Es difícil simplificar la vida. Un enfoque más centrado parece imposible. Durante este último año, puede que le hayan preguntado cientos de veces, «¿Cómo te va?» Su respuesta fue probablemente algo como: «¡He estado TAN ocupado!» Nunca escucha a nadie decir: «He tenido muchísimo tiempo libre y estoy buscando algo nuevo que hacer». Esa persona no existe.
Usted tiene montones de responsabilidades y su agenda es de locos. Siente que está corriendo en la vida. Por esto es que necesitamos tener la intención de aclarar y simplificar la vida. Hemos estado compartiendo con muchas personas la simple disciplina de llevar una única palabra como tema para el año que viene. Hemos decidido dejar de hacer listas de propósitos y comenzar a vivir una Única Palabra. Aun cuando la Biblia no contiene la frase «Tema de la Única palabra,» es interesante notar que la frase «una cosa» aparece cinco veces en la Biblia: una vez en Filipenses y cuatro veces en los Evangelios.
En Filipenses 3:13-14, Pablo usa la frase «una cosa» para traer enfoque y claridad a su llamado. En Lucas 10:42, Jesús dice a Marta «una sola cosa es necesaria.» Lucas 18:22 y Marcos 10:21, ambos, incluyen Sus palabras al hombre rico y expresan la falta de «una cosa.» Juan 9:25 también incluye la frase cuando el hombre que había sido ciego dice a los fariseos: «Una cosa sé: que yo era ciego y ahora veo.» En la misma forma en que la Escritura usa estas palabras, también nosotros podemos usarlas pidiendo a Dios que nos revele el tema de la Única palabra para el año.
Cuando iniciamos este proceso, la mitad de la diversión estaba al escoger la palabra del año, pero hemos aprendido que no somos necesariamente nosotros los que la escogemos, sino Dios la revela a nosotros. Dios puede ciertamente sembrar y ungir una palabra específica en su alma. En los primeros años, admitimos que se trataba más de nosotros escogiendo una palabra y muy poco de recibir la palabra de Dios.
Incluso de esa forma, ¡Dios aún lo usó! Pero, mientras nos volvemos más experimentados en el proceso, aprendemos a escuchar realmente y a ver como Dios nos guía en la selección de la palabra. Al escuchar la voz de Dios, encontrará una palabra divina, no sólo una palabra buena.
Disfrute el proceso y recuerde: una Única Palabra. No una frase. Ni siquiera dos palabras. Centre el enfoque para cambiar su vida. ¡Una única palabra!
- ¿Por qué es tan difícil simplificar la vida? ¿Por qué es esta vida tan compleja?
- ¿Por qué cree usted que intentamos impresionar a la gente con más en lugar de menos?
- ¿Qué le está diciendo Dios ahora acerca del tema de su Única Palabra para el año? Comprometa un tiempo serio para orar y pedir a Dios que le hable.
Tarea
Lucas 10:42; Lucas 18:22; Marcos 10:21
Tiempo extra
«Amado Padre celestial, te pido por una única palabra. Quiero una palabra que venga de Ti. Por favor, revélate a mí. Estoy listo para recibir la palabra destinada para mí. En el nombre de Jesús, amén.”
En el próximo artículo te haré la entrega de los dos días restantes para completar el ejercicio.
Deseo que éste ejercicio sea de tu utilidad y puedas lograr las metas y objetivos que te has propuesto para este año nuevo.
Ricardo Torres G.
Comprometido con tu éxito