Se termina el año, ¿Te has preguntado cuál es tu balance?

Entrado el mes de diciembre comienzan las reflexiones, algunas personas de una manera muy positiva y optimista; otras de manera quejumbrosa y pesimistas buscando culpables de su mala suerte, resignadas a que el próximo año les valla mejor.

Tengamos en cuenta que el balance que nos hagamos del año que termina no sólo tiene que ver con los logros económicos. También tiene que ver con aquellos logros personales, profesionales y sobre todo con nuestra salud la cual prevalece sobre todas las cosas materiales.

Es decir que en nuestro balance en el cual incluimos los resultados y éxitos alcanzados, necesariamente nuestro estado de salud para bien o para mal ha jugado un papel importante.

No sé si te parece interesante esta reflexión, pero a decir verdad hay personas que se refieren al tema de la salud con chistes que parecen van en serio, como “si el trabajo es salud que trabajen los enfermos” una manera de menospreciar lo importante que es la salud pasando por alto lo indispensable que es ésta para lograr la prosperidad.

En este y todos los casos la salud es algo muy importante que tiene que ver mucho con la prosperidad que hayas podido alcanzar por los buenos resultados y éxitos en este año que está por terminar, que han quedado incluidos en tu balance.

A propósito del tema, Arthur Schopenhauer nos deja la siguiente reflexión:

 “Tanto prevalece la salud por sobre todos los bienes exteriores que probablemente un mendigo sano sea más feliz que un Rey enfermo.”

Así no queda ninguna duda que tu balance tiene que ver con la salud, que de una u otra forma tienen mucho que ver con las cifras económicas que aparecen en tu balance.

Ahora, si quieres saber cuál es tu balance al terminar éste año, te invito a que hagas una reflexión respondiendo sólo las siguientes preguntas (podrían ser muchas más), en mi caso lo primero que yo hago antes de responder es agradecer a Dios por mi salud:

¿Cuánto suman los activos totales, en tu balance personal o de tu negocio?

¿Tus ingresos económicos son mayores que tus gastos?

¿Cuántos clientes nuevos obtuviste?

Y si eres dependiente, ¿adquiriste un mejor empleo?

Hay que tener en cuenta que las respuestas a las preguntas planteadas no tienen ninguna validez sino se compararan así:

Si el total de activos en tu balance es mayor al saldo registrado en el balance del año pasado, entonces has ganado valor económico. Si ocurrió lo contrario perdiste valor económico.

Con ingresos mayores a los gastos obtuviste superávit o utilidades. Contrario, déficit o pérdida.

Obtener nuevos clientes hacen que nuestra base de clientes sea mayor, por lo tanto, la posibilidad de hacer más ventas las cuales originan mayores ingresos y mayores utilidades.

Y si lo que lograste fue un nuevo empleo para que este sea mejor tiene que cumplir con mejores condiciones y una mayor remuneración, con relación a tu empleo anterior.

¡Si tu balance fue positivo, mil felicitaciones!

Sea cual sea tu balance o situación, lo que tienes que hacer ahora para comenzar el año nuevo es formular tu plan estratégico desarrollando las cuatro actividades que te que relaciono para que puedas evitar los errores cometidos y capitalizar las experiencias aprendidas:

  1. La misión o razón de existir de tu negocio, es decir los productos y servicios que produces y/ o distribuyes.
  2. Los objetivos. Qué resultados se lograrán y cuándo
  3. La estrategia. Es decir, el plan para lograr la misión y los objetivos
  4. Las políticas. Directrices amplias para la toma de decisiones.

Espero que este articulo sea de tu utilidad y lo puedas poner en práctica para alcanzar el éxito.

Finalmente, te deseo una feliz navidad y un próspero año nuevo. Que todos tus deseos se cumplan.

 

Ricardo Torres G.
Comprometido con tu éxito