La pandemia del Covid-19 está causando muchos daños en la vida cotidiana de la humanidad, rompiendo todos los esquemas de la vida moderna. No hay ningún precedente que compare la crisis que estamos viviendo por causa de este terrible mal, al menos con el siglo pasado.
Lo terrible es que este mal vino para quedarse y tendremos que acostumbrarnos a con vivir con él, por lo menos hasta que se inventan la vacuna contra el mal, cambiando todos los protocolos de convivencia social. Esta situación está marcando un antes y un después.
Los negocios y la empresas se encuentran cerradas, con lo cual se está generando una crisis económica por la falta del flujo de caja que genera la dinámica de la economía a través de la oferta y la demanda de bienes y servicios.
Esto está generando ajustes económicos no solo en la familia, también en las empresas que se están viendo afectadas por la crisis cuya situación se verá reflejada en sus estados financieros.
Mientras las empresas tradicionales están pensando cómo reestructurarse para recuperar lo perdido; otras actividades económicas se han fortalecido como:
El trabajo virtual desde casa en servicios, comunicaciones y educación entre otros dada las plataformas tecnológicas del mundo moderno.
Las empresas convencionales de comercio, servicios e industriales no dejarán de funcionar, sencillamente están en una especie de receso obligado pero haciendo sus cuentas de cómo será en adelante su situación económica y financiera.
De momento la situación financiera de las empresas se está viendo duramente afectada, tanto en la estructura de sus activos como con los compromisos que tienen que atender con sus acreedores internos como externos.
“Las respuestas globales al brote de la enfermedad del coronavirus 2019 (COVID-19) siguen evolucionando rápidamente. El COVID-19 ya ha tenido un impacto significativo en los mercados financieros globales, y puede tener implicaciones contables para muchas entidades.
Algunos de los impactos clave incluyen, pero no se limitan a:
- Interrupciones en la producción.
- Interrupciones en la cadena de suministro.
- Falta de disponibilidad de personal.
- Reducciones en ventas, utilidades o productividad.
- Cierre de instalaciones y tiendas.
- Retrasos en las expansiones de negocios planificadas.
- Incapacidad para aumentar el financiamiento.
- Mayor volatilidad en el valor de los instrumentos financieros.
- Reducción del turismo, interrupciones de viajes no esenciales y deportes, actividades culturales y de ocio. (Sic) deloitte.com”
Por lo tanto las empresas tendrán que registrar algunos ajustes contables acordes con la actual situación de crisis y poco comunes en situaciones económicas normales.
Por ello dentro de su planeación financiera estarán teniendo en cuenta algunas estrategias para cerrar lo mejor posible el periodo contable de este 2020, lo cual se verá reflejado en sus estados financieros.
Me surge entonces la pregunta ¿Qué debería tener en cuenta las empresas para elaborar los estados financieros?
Cómo quiera que los estados financieros reflejan la situación financiera y económica de la empresa, a todos nos conviene que a las empresas no les vaya tan mal con esta crisis y al final puedan presentar unos estados financieros razonables y acordes con la crisis vivida.
Si no se abren las empresas, a pesar de todo el riesgo para el ser humano no habrá estabilidad laboral o no empleo, de la misma manera, no habrá circulación de efectivo y la economía continuará en crisis.
Lo mejor es que las empresas vuelva a abrir, que les vaya bien y que se recuperen lo más pronto posible, para ver si podemos volver a vivir una vida normal entre comillas, dada la amenaza del virus hasta tanto se invente la vacuna; pero seguirá la inseguridad, la injusticia y la corrupción.
Para responder a la pregunta que estoy planteando arriba, dada la crisis por culpa del Covid- 19 ¿Qué debería tener en cuenta las empresas para elaborar los estados financieros?
Encontré la respuesta en un articulo publicado por TMF Group proveedor líder de servicios administrativos y de cumplimiento crítico, el cual transcribo textualmente.
Con el objetivo que te sirva como una guía de implementación de las estrategias que propone el articulo, para que puedas mitigar de alguna manera la crisis que está viviendo tu empresa, por la crisis ya comentada.
Sobre todo para que puedas presentar unos estados financieros razonables, de acuerdo con la situación
“Mientras la pandemia del coronavirus causa una ruptura sin precedentes, ¿qué deben tener en cuenta las compañías al elaborar los estados financieros?
Lo que ha sucedido en las últimas semanas y lo que sucederá durante los próximos meses ha sido inesperado y aún no se entiende por completo.
La crisis del coronavirus es, en primer lugar, una tragedia humana, por supuesto, pero ha modificado todos los aspectos del mundo moderno, causando un trastorno incalculable para los negocios.
A medida que los efectos de la pandemia continúan desplegándose, las políticas sanitarias, comerciales y gubernamentales están cambiando rápidamente en respuesta a ello, y esto está creando un campo minado para las empresas cuando se trata de preparar estados financieros.
Revisar, reconsiderar, reformar
Es probable que la mayoría de las organizaciones tengan todo listo para cerrar las cuentas de 2019, pero aún deben evaluar el impacto de la crisis del coronavirus en su negocio y pensar en los riesgos o incertidumbres, o en cualquier acción de mitigación que deba incluirse como declaraciones.
Las compañías deberían considerar seguir los siguientes pasos.
- Evaluar si la COVID-19 es un evento que implica o no ajustes en los estados financieros de 2019.
- Evaluar el impacto de la COVID-19 en estimaciones y juicios inherentes a la presentación de información financiera.
- Evaluar si aún es necesario preparar las cuentas sobre la base de un negocio en funcionamiento.
- Preparar declaraciones adecuadas en caso de que evalúe que la COVID-19 es un evento material que no implica ajustes. Las declaraciones deben incluir la naturaleza del evento, la estimación del efecto financiero, el impacto en el valor de activos y pasivos, el impacto en los ingresos, el impacto en los convenios de deuda.
- Evaluar si la auditoría se completará a tiempo para presentar los estados financieros.
En 2020, se sentirá el mayor impacto en términos contables, y las políticas necesitarán ser reconsideradas a la luz de la COVID-19. Se deberán tomar una gran cantidad de medidas.
- Valuación del inventario: será necesario repensar si los acuerdos de compra tradicionales ya no son válidos y las empresas necesitarán encontrar nuevas formas de obtener los bienes que necesitan. ¿Qué efectos tendrán estos nuevos acuerdos?
- Deterioro: es muy probable que los activos valgan menos que en el pasado, por eso es importante evaluar las disposiciones necesarias en relación a este tema.
- Reconocimiento de ingresos: ¿deberán revisarse los principios de reconocimiento de ingresos debido a los problemas de cobranzas?
- Volatilidad cambiaria: pregunte cómo se verá esto en las cuentas. ¿Se necesitarán instrumentos de cobertura adicionales para mitigar el riesgo?
- Operaciones discontinuas: ¿el cierre de cualquier parte del negocio afectará los estados contables?
- Acuerdos de préstamo: ¿cualquier disminución en las operaciones afectará los índices financieros y exigirá pactos en los acuerdos?
Planificación sólida
La lista detallada anteriormente no es exhaustiva, y será necesario tomar medidas para prever estos y otros problemas.
Si aún no lo han hecho, las empresas deberían crear un grupo de trabajo para identificar las áreas más afectadas por la situación. Este equipo debe ser multidisciplinario, ya que esto no solo se trata de políticas contables sino que incorpora elementos legales y también incluye contratos y cláusulas.
Estos grupos de trabajo deben continuar monitoreando las partes afectadas de la organización y mapear sus hallazgos contra las políticas contables, lo que podría ser crucial en la planificación de futuros eventos denominados “cisne negro”. También es importante pensar en el acceso a los documentos; cualquier empresa que no tenga aún un sistema de gestión de documentación o documentación electrónica en todas las ubicaciones en las que opera, debe considerar cómo abordará esto.
La magnitud de esta crisis no tiene precedentes, al menos en nuestra vida, y las consecuencias y el impacto total son desconocidos. Sin embargo, una planificación sólida y estar actualizado con las novedades le brindarán la mejor oportunidad para correr con ventaja.”
Ricardo Torres G.
Comprometido con tu éxito