Cómo mejorar el flujo de Caja de tu empresa

En toda actividad empresarial se desarrollan funciones  de operación, financiación y de inversiones, para lo cual se requiere que la empresa mantenga un flujo de caja favorable que le permita apoyar dichas funciones para la supervivencia.

El flujo de caja está relacionado con la entrada y salida de dinero, es decir el dinero que llega como ingreso y se va de forma de gastos. Destinado para  atender las necesidades de capital de trabajo, la reposición de activos, la atención del servicio a la deuda y el reparto de utilidades.

El objetivo principal de cualquier negocio es generar utilidades, por lo que el flujo de dinero debe estar siempre en números azules, es decir en saldo positivo.

La solvencia económica es uno de los signos vitales de la empresa. Y es a través del flujo de caja que se puede interpretar la solvencia de una empresa. De este modo, sabes que si tu empresa está insolvente, no puede pagar sus deudas y por tanto, si en un periodo corto de tiempo no es capaz de generar nuevos ingresos, va a la quiebra.

Ahora bien, la operación de la empresa está relacionada con los hechos económicos que son registrados en la contabilidad con la cual se produce información para la toma de decisiones, es por esto que el flujo de caja cobra una vital importancia para la salud financiera de la empresa.

Siendo así, ¿te gustaría conocer algunas pautas para mejorar el flujo de caja de tu empresa?

Aquí tienes cinco consejos que encontré en altonivel.com los cuales te transcribo textualmente para que los pongas en práctica y puedas mejorar el flujo de caja de tu empresa:

“Facturación rápida

Muchos negocios tienen facturan a sus clientes al finalizar cada mes, dejando dinero que podría estar en sus cuentas bancarias en los bolsillos de otras empresa.

¿Qué se recomienda? En vez de esperar a facturar cobra inmediatamente cuando el trabajo haya sido completado. Si tu negocio consiste en cobrar por horas, puedes facturar dos veces al mes.

Deudas

El dinero que se te debe pero no cobras es un agujero en tu flujo de caja. Revisa de forma regular tus cuentas que están por cobrar. Luego, llama o envía un correo electrónico pidiendo el pago lo antes posibles.

Cuando el recordatorio no funciona es hora de poner a trabajar a las agencias de cobro.

Premia a quien paga rápido

Puedes hacer que algunos de los clientes paguen inmediatamente ofreciéndoles un descuento si pagan cuentas futuras –por ejemplo, mensualidades- al principio, impulsando de esta forma tu flujo de dinero. Lo más común es un dos por ciento de descuento si se paga dentro de un plazo de 10 días.

Paga las cuentas sólo cuando vencen

Determina hasta qué día del mes te permiten tus proveedores pedir ingresar el pago. Entonces, espera a pagar cuando la fecha venza en vez de pagar de inmediato.

¿La razón? De esta forma ayudarás a mantener el dinero en flujo, es decir, que lo mantendrás en tu negocio por mucho más tiempo.

Recibe una parte

En vez de esperar hasta que un trabajo esté terminado para facturar, exige que se te pague una porcentaje antes de que comiences el trabajo, usando como excusa supuestas malas experiencias anteriores. Así, puede cobrar entre 30% y 50% del total, antes de comenzar. Otra fórmula es dividir la factura en tres partes: primero, antes de que el trabajo comience, segundo, durante la ejecución, y tercero, una vez que hayas terminado.”

Ricardo Torres G.
Comprometido con tu éxito