Todas las personas aunque no lo proclamen el objetivo que más persiguen es tener éxito en la vida en todos sus ámbitos llámense personal, profesional o empresarial. El éxito equivale a logros, a cumplimiento de sueños, a alcanzar metas y en la escala de posiciones.
El éxito es el objetivo que se convierte en un propósito específico y cuando trabajamos en la vida en pos de ese propósito y lo logramos, podemos decir que somos personas de éxito.
No es suficiente perseguir el objetivo, es evidente que en le camino hay obstáculos para alcanzar el éxito. La situación no es fácil puesto que los problemas estarán presentes y lo mejor es enfrentarlos sin temor, con determinación y resolución.
De toda la situación que se vive en los momentos de una crisis que puede ser ocasionada por la falta de empleo o la quiebra de un negocio, se puede perder la dignidad, el respeto, y la autoridad de la misma familia, sino manejamos la situación crítica con sabiduría.
Lo importante dentro de la crisis es no perder el objetivo, tener paciencia, revisar nuestras metas, elaborar un nuevo plan y seguirlo fielmente.
Pero sobre todo para allanar el camino que nos apoyemos en la mano de Dios, teniendo confianza en él como dice en la palabra que te deseo compartir:
“No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia” Isaías 41:10- R.V 1960.
Esta cita es una excelente y poderosa, te la recomiendo. Pero si sientes que no está en tus fuerzas encontrar el objetivo que persigues te recomiendo algo que es muy poderoso; pídele a Dios a través de la oración que en sus fuerzas te de las de la solución para alcanzar tu objetivo.
Te deseo muchos éxitos,
Ricardo Torres G.
Comprometido con tu éxito