No existen las pequeñas «mentiras piadosas», al encubrir la verdad se van acumulando y sólo hacen que al descubrirlo la decepción y el dolor sean mucho mayores. Así creemos que nos podemos evadir de cualquier compromiso o responsabilidad diciendo mentiras piadosas.
La franqueza es lo mismo que verdad. Como dice en la palabra, que es consistente, fiel y confiable. Dios es verdad y Jesús la verdad personificada- Salmo 96
A nivel personal ser descubiertos no sólo hace sentir mal sino que genera problemas de convivencia y credibilidad; a pesar del riesgo consciente que se corre, algunos jefes, directores o gerentes no importa su jerarquía se valen de mentiras en el desarrollo de sus relaciones labores.
Es muy común ver sobre todo en épocas de crisis que los gerentes de empresas, por mejorar supuestamente la rentabilidad no son sinceros en la contratación del personal: Pagan por debajo de lo establecido en la escala salarial para el cargo, no son claros en las funciones asignadas, ubican personal fuera del perfil para el cargo que esta siendo contratado; es decir cambian a conveniencia las condiciones establecidas por la empresa, esto que se podría tipificar con desorganización, no es otra cosa que falta de franqueza para ejercer la gestión administrativa.
Para un líder con este estilo, no le dura mucho la dicha. Mas temprano que nunca caerá sobre su cabeza “el mazo de la verdad” de todo el mundo, cuando comiencen los conflictos de personal por el inconformismo y falta de lealtad hacía su jefe cuando descubren las mentirillas, en este caso esas que dijo para mejorar supuestamente la rentabilidad de la empresa y en otro tipo de escenarios como el manejo de conflictos que para dar contentillo, se centran el la persona y no en el problema.
Igual ocurre en cualquier relación: Puede ser con clientes, ofreciendo beneficios que no tienen sus productos o servicios, con proveedores para ganar descuentos, se comprometen con falsas promesas de pago.
Dicen que es mejor una verdad que duela a una mentira que mate. Ser franco con tu equipo, te ayudará a lograr la primera habilidad de negociación: la confianza. Tu equipo sabrá que le hablas con la verdad y conocerán el verdadero estado de la situación cada vez que les comuniques algo.
Nadie esta libre de pecado, el que lo este que tire la primera piedra. Entonces manos a la obra. Te invito a un pequeño ejercicio de autoevaluación, si no has incurrido en alguna de las mentirillas que te he relacionado, saca por lo menos una mentirilla, esa que hallas utilizado para evitar herir a alguien, molestarle o contrariarle
Espero que esta reflexión te haya sido útil y te deseo muchos éxitos.
Ricardo Torres G
Comprometido con tu éxito